Bajo el Patrocinio de María

 

Presencia del patrocinio de la Virgen María en nuestra Congregación

Aunque la advocación mariana bajo la que se encuentra nuestra Congregación no debe su nombre directamente a la voluntad de sus Fundadores, sin embargo, profundizando en su espiritualidad, encontramos como fuente e impulso de sus obras apostólicas y de su carisma fundacional el patrocinio de la Madre de Dios.

El carisma del P. Cosme Muñoz penetra en profundidad en ese patrocinio. Precisamente en las Constituciones  de 1673, aparecen estas luminosas ideas: Este colegio se fundó debajo del patrocinio y advocación de Nuestra Señora de la Piedad y con mucha razón, pues siendo esta soberana el patrocinio de todos los católicos, más bien lo será de unas vírgenes que, careciendo de padres  en lo temporal, se acogen al amparo de aquella Virgen y Madre para ser esclavas suyas y para alcanzar el estado de vida que les convenga (art. 1º).

La devoción a María la traduce el P. Luis Pérez en una actitud concreta de imitación. Ella será para sus hijas: Estrella y Norte, es decir, modelo y guía, y estas encontrarán en María una Madre que las protege y gracias y amparo en vida y en muerte, en las tentaciones y borrascas de la vida (Constituciones, cap.VI, 1718).

Por todo esto podemos afirmar que la advocación de la Titular de la Congregación se encontraba de forma implícita en la dimensión mariana de los Fundadores y que de manera providencial, D. Ramón Guillamet y Comá, obispo de Córdoba, lo tradujo de forma explícita poniendo bajo el patrocinio de la Madre de Dios a la Congregación en 1919, fecha en que se fusionaron las obras de los PP. Cosme y Luis, dando lugar a la Congregación de Hijas del Patrocinio de María.

 

Significado de la advocación de María como patrocinio

En el título de PATROCINIO se resalta especialmente la maternidad espiritual de María. La Madre de Dios es nuestra madre, madre de la Iglesia y de todos sus miembros. A esta maternidad espiritual corresponde una auténtica filiación mariana. Somos hijos de María que nos ha trasmitido, a través de Cristo, la vida divina.

Patrocinio significa también protección y amparo. En María encontramos una madre que nos protege y acoge. Ella es nuestro auxilio y mediadora, abogada, modelo, estímulo, estrella, norte y guía: PATROCINIO para cuantos se sienten necesitados.

 

mo hacer presente el patrocinio de María en nuestro mundo

Hacemos presente el patrocinio y la maternidad de María cuando amamos, nos preocupamos y acercamos a las personas con actitud de generosa sencillez, nos sentimos afectados por las necesidades de los hombres y mujeres de nuestro tiempo y somos solidarios de una forma especial con los más pobres y con aquellos que son injustamente tratados por la sociedad a causa de su condición social, raza o religión.

Mostramos su patrocinio cuando a ejemplo de Ella, abrimos nuestra mente y nuestro corazón a tantos hermanos nuestros que hoy necesitan amparo y consuelo porque están siendo muy duramente tratados por nuestro mundo insolidario y replegados en sus fronteras, aportando consuelo y esperanza, derribando los muros de la intolerancia y el miedo y acogiendo a todos bajo el manto de la misericordia y la comprensión. Este es el gran reto para todos los que nos sentimos bajo su PATROCINIO.

 

PATROCINIO EN NUESTRAS REALIDADES

MarÍa del Patrocinio…
Tu nombre nace al pie de la Cruz, mujer del paso al frente que sabe estar con su hijo en el dolor y el sufrimiento, en el martirio, rechazado por todos pero amado por ti, aún en la incertidumbre del silencio de Dios.
Al pie de la Cruz recibes el encargo de ser nuestra Madre, Patrocinio para cuantos están desamparados, y nosotros recibimos ser tus hijos.
Es junto a la cruz que tú asumes tenernos bajo tu manto, cuidándonos en los avatares de la vida.
Nosotras, Hijas del Patrocinio de María, somos llamadas a vivir al pie de los crucificados, cubriendo indigencias, prolongando el manto protector de María, incluyendo a todos, porque es la largura y anchura de tu manto, el lugar donde mejor se vive como hermanos: nuestra tienda.