La solidaridad se hace realidad en un niño/a en Venezuela y Colombia.

El  apadrinamiento  es  una  forma  de solidaridad,  no  es  la  única,  ni  la  mejor.   El   apadrinamiento   permite acercar  fronteras,  generar  encuentros y  establecer  una  verdadera  relación humana. El  gesto  de  un  padrino/a,  su  intención solidaria  tiene  un  rostro,  uno  entre muchos  niños/as  que  se  benefician  con tu  ayuda.

Ver   la   ilusión   de   un   niño/a,   sus reacciones  de  sorpresa,  «sentirse»tenido  en  cuenta  y  valorado  por alguien  que  está  al  otro  lado  de mundo,  es  impagable.  Este  afecto  es muy  importante  y  resulta  aún  más significativo  ante  una  realidad  tan dura,  donde  niñas-mujeres  y  niños- hombres  viven  una  infancia  golpeada por la injusticia  y la desigualdad que viola  hasta  el  más  básico  de  sus derechos cada día.

Hoy quiero agradecer tu  apoyo y solidaridad. Te invito a seguir motivado/a  a llevar tu   mirada  a Venezuela y Colombia  aquí hay rostros  que  se  benefician  de tu solidaridad.  La  participación  solidaria  se  hace  visible…juegan,  van  a  la  escuela,  tienen  una personalidad  y  una  historia  familiar detrás.

Nosotras las Hijas del Patrocinio  de María en estos países somos  un puente de lazos que está al servicio de los niños/as y jóvenes y de sus padrinos. Vamos a seguir al lado de los más vulnerables, como son los menores, dándoles ese apoyo que necesitan ahora más que nunca.

eres una  parte muy importante de su futuro, ya que ayudas a cubrir sus necesidades y a garantizar que se cumplan los derechos fundamentales de la educación, alimentación, salud y vestido, así como a mejorar la atención que reciben.

Una  vez  más,  gracias  por  permitirnos ser  intermediarias..