Durante los días 23 al 31 de julio celebraremos en Cájar (Granada) la VII Asamblea Trienal, estará precedida por los Ejercicios Espirituales que dirigirá el P. Salvador León c.m.f.

Nuestra Asamblea tendrá como trasfondo la preparación del Sínodo donde se plantean tres palabras claves que nosotras también queremos hacer palpables en la preparación, realización y proyección de nuestra Asamblea: Comunión, Participación y Misión.

La celebración de la Asamblea trienal es un alto en nuestro camino para ver si realmente nuestro paso lleva la dirección hacia la que nos comprometimos en nuestro último Capítulo General: “Profundizar en nuestras raíces, para dar frutos de vida” y para ello vivir nuestras Constituciones que para nosotras es el camino de Evangelio al que fuimos llamadas para concretar nuestra vocación dentro de la Iglesia.

Estamos en la fase preparatoria donde se están realizando los trabajos que se presentarán a la Asamblea, en las comunidades y en los centros educativos.  Esta fase es de suma importancia, ya que de ella va a depender los frutos que queramos cosechar y el resultado de la misma.

En este tiempo hemos entrado en una dinámica de estudio, reflexión y oración para que el Espíritu sea quien dinamice y se haga presente en todos nuestros trabajos y decisiones. Como todos conocemos, la Asamblea es un medio importante de participación, corresponsabilidad y comunión cuyo fin principal es la revisión de las Disposiciones y Acuerdos Capitulares en este tiempo transcurrido desde el Capítulo General y la proyección hacia el futuro de la vida de la Congregación. No tiene carácter decisorio como el Capítulo pero nos compromete a profundizar e impulsar las directrices  emanadas en el mismo.